La Policía provincial desplegó un fuerte operativo de seguridad vial junto a la Dirección de Tránsito de Mercedes y de la capital correntina para evitar accidentes y contratiempos en la celebración a la que llegaron más de 100 mil personas durante este domingo.
Ya desde el viernes comenzaron a arribar al lugar para acampar allí decenas de delegaciones de diversos puntos de la provincia, el país y también de países limítrofes como Uruguay, Paraguay y Brasil.
La tradición popular le adjudica varios «milagros» al gaucho correntino asesinado por la Policía el 8 de enero de 1878 donde actualmente se encuentra la gruta en la que miles de fieles le rinden homenajes y demostraciones de fe todos los años.
Como todos los años, los devotos prendieron velas rojas, llevaron ofrendas, rezaron, expresaron plegarias, cantaron y bailaron chamamé rodeando la tumba del «Gauchito» asesinado en 1878.
Según el relato popular correntino, Gil fue perseguido desde 1870 por la Policía tras desertar del Ejército Federal en el que había sido reclutado para luchar contra los unitarios de Buenos Aires.
El «Guachito» se manifestaba en contra de la guerras internas entre los pobladores del territorio nacional, relata la historia en boca de sus fieles.
El primer «milagro» que se le atribuye a este santo popular correntino es el de haber «curado» al hijo del soldado que finalmente lo degolló.
«Al volver a tu casa encontrarás a tu hijo muy enfermo, pero si mi sangre llega a Dios, juro que volveré en favores para mi pueblo«, le habría dicho Gil al soldado.
Entonces el soldado desertó del ejército, volvió al lugar donde había matado a Gil, enterró el cuerpo y le imploró perdón y sanación para su hijo: tras varios días el joven enfermo se curó.
NOTA PROFÉTICA Y LLAMADO A LA GUERRA ESPIRITUAL:
brujería y 3) el ocultismo y el esoterismo.»
hay duda alguna, a esta altura de los tiempos, que estamos transitando los últimos segundos del reloj profético del Eterno. Por eso, es que vemos a los hombres desesperados correr de aquí para allá buscando respuesta a sus clásicas y milenarias preguntas existenciales. Ante esto, las tinieblas, con un instinto infernal bien activo, presienten que sus días de actividad son ya casi inexistentes. Por ende, apresuran sus dinámicas de artimañas de error, realizando con las mentes de los hombres el negocio que más caro le ha costado al lado de la humanidad que lo practica: la ignorancia.
olvidado la ley de tu Dios, Yo también Me olvidaré de tus hijos.»
porque engañosas son sus imágenes fundidas, y no hay aliento en ellas.»
sanidad de nuestra tierra. La misma debe comenzar por un fuerte sacudimiento sobrenatural que aún moviendo las estructuras naturales despierte al pueblo argentino de un sueño que lleva activo en la región desde tiempos inmemoriales.