Es una mitzvá (mandamiento) especial regocijarse en Sukot. Por esta razón, los días intermedios de Sukot se caracterizan por celebraciones llamadas Simjat Beit HaShoeva, conmemorando las libaciones de agua que eran ofrecidas en el Santo Templo durante Sukot.
La festividad de Sukot está relacionada directamente con el “agua”, ya que es el día del juicio universal respecto a las bendiciones de lluvia e irrigación para el año venidero.
Sukot también es un tiempo de bendición universal para todos los pueblos –simbolizados por las 70 ofrendas adicionales que se ofrecían en el Templo durante la festividad, que correspondían a las 70 naciones del mundo.
El Libro de Eclesiastés, escrito por el Rey Salomón, es leído en Shabat durante Sukot. El tema de Eclesiastés es la vana persecución de placeres mundanos en contraposición a la búsqueda espiritual eterna. En realidad, la frágil construcción de la Suka nos recuerda que las posesiones materiales son transitorias.
El séptimo día de Sukot es llamado Hoshaná Rabá, que se caracteriza por la procesión de los siete circuitos alrededor de la Bimáh, con las Cuatro Especies en la mano. La procesión culmina con el aporreo de la rama de sauce en el piso. Hoshaná Rabá es conocido como el día del sello final del juicio que comenzó en Yom Teruah. En Hoshaná Rabá, algunos tienen la costumbre de leer el Libro de Deuteronomio y permanecer despiertos toda la noche estudiando Torah.
Tomado de: Aish Latino