La despenalización del aborto se atasca en Argentina
Un nuevo recuento de votos ha retrasado el debate sobre el contenido del proyecto de ley de Interrupción Legal del Embarazo.
Los esfuerzos para hacer avanzar en Argentina una legislación que
despenalice el aborto sufrieron esta semana un nuevo parón. Cuando
parecía que todo estaba finalmente encauzado y que las comisiones
pertinentes del Congreso empezarían a debatir el contenido del proyecto
de ley de Interrupción Legal del Embarazo, un nuevo recuento de votos
echó por tierra esa toma en consideración y todo el proceso deberá
empezar de nuevo, quizás el próximo año, si no da tiempo en las pocas
semanas que quedan antes de las vacaciones parlamentarias.
El proyecto, similar al defendido por la Campaña Nacional por el Derecho a un Aborto Legal, Seguro y Gratuito
y a los que se conocen en Europa como leyes de plazos, fue presentado
el pasado martes ante la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de
Diputados, que preside el diputado de Coalición Cívica (CC) Juan Carlos
Vega. Después de dos horas de discusión, el presidente anunció que el
proyecto reunía las firmas suficientes (la mitad más uno de los
diputados presentes) y que pasaría a su inmediato debate en las
comisiones de Salud y de Familia. Según sus cálculos, en la sala había
11 parlamentario y el dictamen había obtenido seis firmas. La noticia
fue acogida con alegría por los grupos feministas que se habían reunido
frente al Congreso y el dictamen fue calificado de histórico por las
diputadas impulsoras, de varios grupos diferentes.
diputados, sin embargo, apelaron inmediatamente la decisión, por
considerar que en la sala había 15 parlamentarios y que no se había
obtenido la mayoría suficiente. Dos días después, el presidente de la
Comisión admitió que se había producido un error y que «el despacho no
cumplió los requisitos del reglamento» de la Cámara.
relato de un diputado presente, la Comisión, que tiene 31 miembros,
comenzó sus trabajo con once, pero a lo largo de los debates se sumaron
otros cuatro, con lo que el aval hubiera necesitado ocho firmas. El
reglamento interno hubiera permitido que en las 48 horas siguientes se
hubieran adherido las otras firmas necesarias, pero finalmente algunos
diputados que se habían mostrado partidarios del proyecto decidieron no
sumarse. Fue el caso, por ejemplo, del diputado radical Ricardo Gil
Lavedra, que defendió el dictamen, pero que explicó que antes de votar a
favor tenía que consultar con su grupo, la Unión Cívica Radical.
medio de la polémica provocada por las idas y venidas del presidente de
la Comisión de Legislación Penal, que llegó a felicitar públicamente
por su éxito a las diputadas impulsoras de proyecto, los defensores de
la despenalización del aborto subrayaron que, en cualquier caso, y por
primera vez, se había podido discutir del tema en una sesión formal
parlamentaria y se comprometieron a reiniciar los trámites con urgencia
dado el poco tiempo que queda para que se interrumpan las sesiones del
congreso, hasta mediados de febrero próximo.
mira con atención las iniciativas en Argentina para despenalizar el
aborto y establecer una ley de plazos, que contrarrestaría las
legislaciones cada día más restrictivas que se imponen o intentan
abrirse paso en otros países latinoamericanos bajo la presión concertada
de las iglesias, tanto la Católica como las evangelistas. La atención
esta puesta también en la actitud que adopte la presidenta, Cristina
Fernández de Kirchner, que acaba de ser reelegida con más del 54% de los
votos y a la que se pide que deje libertad de voto a su grupo
parlamentario, aunque ella misma se haya declarado, personalmente, en
alguna ocasión, contraria a la despenalización.
Fuente: El País
El debate antes de las elecciones _ 2ª Parte
A continuación comparto un informe hecho por Victor Hugo Morales con la triste posición proabortista.