Fuente: Público.es
El nuevo presidente francés subrayó la importancia de las relaciones entre Alemania y Francia para ambos países y Europa.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, han expresado hoy su deseo de que Grecia permanezca en la zona del euro pese a la crisis política que sacude al país heleno y la ruptura de negociaciones para formar gobierno, que está conduciendo a nuevas elecciones.
«Queremos que Grecia permanezca en el euro. Sabemos que la mayoría de los griegos lo quieren«, dijo Merkel en la primera comparecencia de ambos ante los medios tras una primera reunión en la Cancillería Federal.
Por su parte, el nuevo presidente francés subrayó la importancia de las relaciones entre Alemania y Francia para ambos países y Europa y destacó que son «estrechas, equilibradas y de respeto mutuo», una «constante» histórica puntualizó.
Tanto Merkel como Hollande destacaron que «respetan» la decisión de Grecia de celebrar nuevas elecciones y el presidente francés insistió varias veces en su deseo de enviar una «señal» al pueblo griego de que «queremos ayudarles para que permanezcan en el euro».
La canciller alemana recordó que uno de los motivos para la creación del euro fue convertir en «irreversible» la Unión Europea y destacó que la moneda única «no solo es un proyecto monetario, sino político».
Renegociación del pacto fiscal.
Hollande reiteró además la exigencia planteada durante la campaña electoral de las presidenciales galas de renegociar el pacto fiscal de la UE y completarlo con medidas para fomentar el crecimiento y la creación de empleo. En ese sentido subrayó que Alemania y Francia estudiarán juntas ideas y propuestas al respecto y buscarán la manera de aplicarlas legalmente.
El nuevo presidente francés subrayó la importancia de las relaciones entre Alemania y Francia para ambos países y Europa y destacó que, diferencias aparte, son «estrechas, equilibradas y de respeto mutuo», además de calificarlas de «constante» histórica.
La canciller alemana, Angela Merkel, recibió hoy al nuevo presidente francés, François Hollande, con honores militares a su llegada a la Cancillería Federal, para iniciar poco después su primer encuentro bilateral.
Hollande llegó a la sede del Gobierno germano con hora y cuarto de retraso sobre el horario previsto, ya que se vio obligado a cambiar de avión en París, después de que el aparato en el que emprendió inicialmente viaje fuera alcanzado por un rayo poco después de despegar. El político socialista llegó a la capital alemana en su primera visita exterior pocas horas después de ser investido como séptimo jefe del Estado de la V República francesa.