La Biblia, en el relato de Bereshit, dice que Dios le dijo a la serpiente:
“Por cuanto esto hiciste, maldita serás entre todas las bestias y entre todos los animales del campo; sobre tu pecho andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida.”
(Génesis 3:14 – RVR 1960)
Muchos piensan que la frase “sobre tu pecho andarás” significa que la serpiente cuando fue creada por Dios, podía erguirse, y que después de tentar a Eva, Dios la maldijo a arrastrarse sobre su pecho.
Esa teoría no tuvo asidero ni base científica que la comprobase hasta hace un tiempo atrás, cuando un equipo de investigadores halló en Brasil un fósil de de una serpiente de cuatro patas.
La BBC realizó un informe en el que publicó las fotografías del fósil. Aunque no es la primera vez que se encuentra un fósil de serpiente con extremidades, los científicos aseguran que éste es el ancestro directo de las serpientes modernas.
“Éste es el fósil de serpiente más primitivo que se conoce, y es muy claro que no es acuática”, señaló Nick Longrich, investigador de la Universidad de Bath, en Reino Unido, y uno de los autores del estudio.
Según le dijo Longrich a la BBC, la forma de la cola de la criatura no es apta para nadar y no hay signos de la presencia de aletas.
En cambio, su tronco largo y hocico corto son los rasgos típicos de un animal que excava.
Sus extremidades traseras y delanteras (de 4 mm y 7 mm respectivamente) son muy pequeñas y altamente especializadas, con dedos muy delgados y garras en la punta.
Bruno Simoes, especialista en serpientes del Museo de Historia Natural de Londres, quedó sorprendido por el buen estado de preservación del fósil y por lo bien desarrolladas que están sus extremidades.
“Es una sorpresa, sobre todo por su cercanía con las serpientes actuales”, le dijo a Simoes a la BBC.
“Nos da una idea clara de cómo era el ancestro de las serpientes”.
Fuente: Diario Cristiano