«Nuestro capital intelectual es la herramienta que más debemos cuidar, estimular y potenciar en cada persona y de manera colectiva.
Las sociedades que invierten en conocimiento son más prósperas y presentan menores niveles de tolerancia con la corrupción.
Sobre lo primero, la Unesco informa que, en promedio, un año de educación se traduce en un salario un 10% superior.
Sobre lo segundo, las personas que entienden que los logros se consiguen con esfuerzo y reglas de juego no aceptan la trampa.
La inversión en educación, en nuevas ideas y en investigación científica y tecnológica otorga capacidades y crea trabajos genuinos, lo que, a su vez, forja una economía sólida y sustentable que promueve la equidad. Sería contradictorio si esto no fuera así«.
Facundo Manes [Neurólogo y neurocientífico, es rector de la Universidad Favaloro y dirige el Instituto de Neurología Cognitiva (Ineco)]
Gran verdad que no conviene a las estructuras del sistema por lo que es ir contra la corriente invertir en Educación cuando muchas veces la misma población está tan arraigada a la mediocridad que al minimo cambio para beneficio de todos se oponen. Quiera el Eterno llevar a sus escogidos a la transformación de este baluarte tan importante para terminar con todo engaño.