BUENOS AIRES (AP) — La elección de Jorge Bergoglio ha generado gran satisfacción en la comunidad judía de Argentina, la mayor de América latina, que destacó el lunes las cálidas relaciones y el diálogo abierto que el cardenal ha cultivado con los miembros de esa y otras religiones.
La relación de Francisco con los líderes religiosos judíos se puso de manifiesto cuando el ex arzobispo de Buenos Aires participó en la Janucá (Hanukkah) o Festividad de las Luminarias. En esa importante ceremonia de diciembre de 2012 en la que los judíos de este país recordaron la purificación del Templo de Jerusalén en el siglo II antes de Cristo, Bergoglio encendió el primero de los nueve brazos de un candelabro en la sinagoga NCI-Emanu El de esta capital.
«Es muy profunda la capacidad de diálogo de Francisco con otras religiones. Es un hombre abierto al diálogo y lo promueve, no es de los que esperan a que lo llamen por teléfono», dijo a The Associated Press el rabino Alejandro Avruj, de la Fundación Judaica. El líder religioso judío participó en dicha ceremonia junto a los representantes de otras iglesias, como la ortodoxa griega. Los asistentes resaltaron la necesidad de traer la luz al mundo para su transformación.
Ese fue el último acto interreligioso en el que Bergoglio participó en Argentina. En Janucá se encienden de forma progresiva los nueve brazos del calendario (uno por cada uno de los ocho días que dura la festividad más un brazo piloto o iniciador).
Avruj señaló que el ex líder jesuita ha abierto varias veces las puertas Catedral de Buenos Aires para que fuera sede de actos interreligiosos. En noviembre de 2012 ese templo católico se erigió en el escenario donde líderes religiosos judíos, musulmanes, católicos, ortodoxos y evangélicos elevaron una oración por la paz en Oriente Medio. «Todo se pierde con la guerra, todo se gana con la paz. Con la paz se gana la dignidad, el respeto«, dijo entonces Bergoglio.
Otros rabinos como Abraham Skorka han elogiado la decisión de Francisco de tenderle días atrás la mano al rabino jefe de Roma en una carta en la que le decía que espera intensamente «poder contribuir al progreso de las relaciones entre judíos y católicos conocidas a partir del Concilio Vaticano II, en un espíritu de colaboración renovada«. Skorka es autor junto a Bergoglio del libro «Sobre el cielo y la tierra» (2010) en el que ambos conversaron sobre lo divino y humano.
El Gran Rabino de Argentina, Shlomo Ben Hamú, expresó en tanto su deseo de que el Papa pueda contribuir con sus valores a un mundo mejor y especialmente a las relaciones de Israel con sus vecinos.
El presidente del Congreso Mundial Judío, Ronald Lauder, dijo que Francisco no es un extranjero para ellos. «En años recientes ha asistido a muchos actos ecuménicos, coorganizados por nuestro organismo…y siempre ha tenido una oreja abierta a nuestras preocupaciones. Eligiendo a un hombre tan experimentado, alguien conocido por la amplitud de su mente, los cardenales han mandado una señal importante al mundo. Estoy seguro de que el Papa seguirá siendo un hombre dialogante, capaz de construir puentes hacia otras creencias», afirmó.
La Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), una de las principales instituciones de la extensa comunidad judía argentina integrada por unas 200.000 personas, envió una carta al nuevo Papa en la que celebró su nombramiento como cabeza de la Iglesia católica. En ella mencionan la «ascendencia» que tiene la figura de Bergoglio, su «sensibilidad pastoral y destacada actuación».
Judíos contentos con Papa abierto al diálogo.
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| En esta foto del 12 de diciembre del 2012 proporcionada por NCI-Emanue El, el entonces arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Jorge Mario Bergoglio, derecha, enciende la Janukia durante las celebraciones de Hanukkah en Buenos Aires, Argentina. A la izquierda el ragino Sergio Bergman, y a su derecha el rabino Alejandro Avruj, de la congregación NCI-Emanu |
El cardenal argentino visitó en 2010 la reconstruida sede de la AMIA, que fue víctima en 1994 de un atentado que causó 85 muertos y que está considerado el peor ataque terrorista de la historia argentina.
Guillermo Borger, titular de la AMIA, dijo a la AP cuando conoció al ex arzobispo de Buenos Aires se sintió sorprendió por «su humildad y especialmente por lo que es fundamental para la AMIA, que es su compromiso con todo lo que es la problemática social».
El Centro Islámico de la República Argentina envió una carta al papa Francisco donde se congratuló de su designación y recordó que tuvo «el honor de trabajar» con él cuando se desempeñaba como arzobispo de Buenos Aires y cardenal primado de la Argentina. «En esa labor, se logró la institucionalización del Diálogo Islamo-Cristiano» en el país, indicó.
«Hacemos súplicas para que el Altísimo y Misericordiosísimo conceda a Su Santidad un futuro de felicidad y éxitos en su honorífica misión que seguramente aunará voluntades solidarias, tenderá puentes fraternales e interactivos entre el Mundo Católico y el Mundo Islámico, y proveerá de más paz y justicia para toda la humanidad», afirmó.
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En esta nota colaboró la periodista de AP en Buenos Aires Débora Rey
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 liderando el movimiento de religión mundial única)
