Por Prof. Tony González
La letra bet (ב) inicial de Bereshit, que a la vez también es con la que comienza la palabra hebrea beit (casa). Se traza de derecha a izquierda. Es decir entonces, que la entrada es desde la izquierda. Esto me significa, que para entrar a la casa que Elohim creó desde su benevolencia, con el PRINCIPIO, se debe hacer desde la izquierda, lo cual representa el rigor y la autorrestricción (Guevurah).
Es solo a través del ejercicio espiritual de mi voluntad en el arte de la negación del yo, en pos del nosotros, restrigiendo el deseo egoísta, en pos del beneficio altruista, como puedo ingresar a dicha Beit del Padre Celestial o más bien es como Él habita en mi casa.
Esto mismo, me remonta a las palabras del Mesías registradas en el Evangelio de Juan:
«Respondió Yeshúa y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él.»
(Juan 14:23)
Entonces el sacrificio voluntario del Mesías, estaba ya anunciado en la primera letra del PRINCIPIO de la creación de la BEIT del Padre.
Esto me deja en claro y de una manera más asombrosa, lo que significan las declaraciones de Mashiaj registradas en el Evangelio de Marcos:
«Y decía: Abba, Padre, todas las cosas son posibles para ti; aparta de mí esta copa; mas no lo que yo quiero, sino lo que tú.»
(Marcos 14:36)
Por eso también entiendo el porqué la mezuzáh se coloca en el lado derecho de la jamba de la puerta. Porque si bien el rigor (izquierda) es necesario, para entrar en la casa del Padre, sin embargo si no fuese recibido por su benevolencia (derecha), me sería imposible entrar.
Entonces entiendo que mi rigor es para aceptar la Gracia del Padre, manifestada por el Hijo del Hombre, desde el mismísimo BERESHIT.
En pocas palabras: ¡Si entro por la izquierda el Padre me recibe por la derecha!
Orar, meditar y vivir conforme a la Torah del Padre, sería entrar por la izquierda, porque esto implica disciplina, esto es lo que hace que el Padre me reciba con su benevolencia, que sería su Diestra (derecha).