«Tenemos un acuerdo político con el gobierno de Estados Unidos (…) sobre cómo integrar históricamente la primera evaluación de impacto ambiental en el Golfo de México» tras el derrame de la BP, dijo a la prensa el ministro de Medio Ambiente Juan Rafael Elvira.
Explicó que a finales de septiembre autoridades mexicanas se reunirán con representantes del gobierno de Estados Unidos para determinar cómo se realizará esa evaluación de impacto ambiental.
Elvira dijo que si bien la mancha de crudo «quizá nunca llegue a aguas territoriales (de México)», ello no descarta que puedan presentarse «daños a los ecosistemas mexicanos, en este caso marinos».
El ministro reiteró que México cobrará a BP todos los gastos que se puedan generar por el monitoreo y eventual daño por el derrame de petróleo en aguas mexicanas.
La fuga del pozo, a 1.500 metros de profundidad, se presentó en abril pasado y fue contenida a mediados de julio luego de que 4,9 millones de barriles de crudo, equivalentes a unos 780 millones de litros, se vertieran en el Golfo.
Este jueves se dio a conocer que oceanógrafos descubrieron en las profundidades del mar una enorme estela de hidrocarburos procedente del pozo averiado y que hasta ahora era imperceptible.