Guatemala.- El volcán Pacaya ha entrado  en una nueva fase de erupción en Guatemala, provocando fuertes explosiones y columnas de ceniza que han alcanzado los 1.500 metros de altura, mientras que las autoridades siguen evacuando a los pobladores de las áreas cercanas.

Hasta el momento, como consecuencia de la erupción de la noche del jueves, las autoridades reportaron la muerte de dos personas, la desaparición de tres niños de entre 7 y 10 años, al menos 67 personas heridas y miles de damnificados.

Unas 2.000 personas han sido evacuadas hacia los albergues temporales habitados por las autoridades, y cerca de 2.500 permanecen en sus hogares a pesar del peligro que sigue representando el volcán.

Según el último informe de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), la nueva explosión ha provocado nubes de arena volcánica que se desplazan de sur a norte a una velocidad de 18 kilómetros por hora y que han alcanzado de nuevo la ciudad de Guatemala y los departamentos de Escuintla y Sacatepéquez.

Las persistentes lluvias que golpean Centroamérica están dificultando la limpieza de la arena volcánica y las ceniza que están cayendo en un radio de unos cien kilómetros en torno al Pacaya y que han obligado a cerrar el tráfico del aeropuerto internacional La Aurora, en la capital.

 En la capital y los municipios aledaños los vecinos se dedican a retirar de las calles y techos de sus viviendas las miles de toneladas de arena lanzadas por el Pacaya. En varias zonas del área central del país se han registrado interrupciones en los servicios de energía eléctrica y de agua potable, lo cual ha elevado los temores dentro de la población.

El director del Instituto de Vulcanología (Insivumeh), Eddy Sánchez, dijo a los periodistas que «no se descarta» que el volcán continúe registrando erupciones durante las próximas 48 horas.

CALAMIDAD
El Gobierno de Álvaro Colom declaró el jueves el «estado de calamidad pública» en la zona central del país y ha movilizado a todas la instituciones del país para atender la emergencia.
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Tras la erupción, las autoridades ordenaron el cierre del aeropuerto internacional La Aurora, así como la evacuación de al menos cuatro poblaciones ubicadas en las faldas del volcán. La lluvia de arena, que en la capital ha alcanzado más de diez centímetros de espesor, ha provocado además numerosos problemas de tráfico.

Según informa el diario Prensa Libre en su edición electrónica , las víctimas mortales son el periodista Aníbal Archila y dos habitantes de la aldea El Bejucal, que fueron localizados sin vida por los equipos de rescate. El periodista, que trabajaba para Notisiete, resultó alcanzado por rocas incandescentes que lanzó el volcán cuando se encontraba a unos 50 metros del cráter.

CIFRA

2.000 personas han sido evacuadas hacia los albergues temporales 

FRASE
«no se descarta» que el volcán continúe registrando erupciones durante las próximas 48 horas¨: El director del Instituto de Vulcanología (Insivumeh), Eddy Sánchez.