Según les explicaron los familiares a los médicos, el obrero interpretó al pie de la letra los textos del Evangelio según San Marcos, capítulo 9: “Si tu mano te es ocasión de pecar córtatela. Más vale que entres manco a la vida, que con las dos manos al infierno”. Desde hace 20 años es el hombre es parte de una congregación religiosa (que no identifican las fuentes) y se ve que nadie le explicó el verdadero sentido de las enseñanzas de este pasaje del Evangelio.

Después del incidente, el obrero sufrió una gran hemorragia y presa del pánico, comenzó a pedir ayuda a gritos a sus familiares con los que convive. Éstos, sin perder tiempo, le llevaron al Hospital, donde después de una rápida consulta médica decidieron iniciar la cirugía para reconstruirle el órgano amputado. La intervención duró unas 3 horas, y en ella intervino un equipo multidisciplinar de diferentes especialidades quirúrgicas.

Según comentó después de finalizar la intervención el urólogo Alberto Barros, el paciente se cortó el miembro con un cuchillo tan afilado que provocó unos cortes parecidos a los que hace un bisturí, lo que permitió que los especialistas pudieran reconstruir todos las estructuras cercenadas (músculos, arterias y venas, cuerpos cavernosos, nervios) lo cual asegura que si no surgen complicaciones el paciente pueda recuperar su capacidad sexual.