Un eufemismo es una palabra o una expresión utilizada para sustituir una palabra que socialmente se considera ofensiva o de mal gusto. Pueden sustituir términos de diversos tipos, por ejemplo en palabras que pueden resultar groseras, escatológicas u obscenas. Se refiere a un concepto que sirve para reemplazar a otro más ofensivo, vulgar o hasta tabú; se considera que el utilizado es el adecuado por ser políticamente correcto. Esto significa que la utilización de un eufemismo impide chocar con el interlocutor al decirle algo que, de otra forma, podría ser intolerable para él.
En el mundillo religioso de los últimos veinte años se ha hecho hábito el usar eufemismos para que el idioma «evangelicoide» permita un merchandinsing que garantice el éxito de cada negociado religioso.
Aquí les comparto los 25 eufemismos más utilizados:
- Al que quiere vivir en santidad tal como la Instrucción lo enseña lo llaman legalista.
- Al que quiere seguir a Yeshúa fielmente, amando la Torah, lo llaman fanático o judaizante.
- Al que se aparta del mundo lo llaman religioso….
- Al libertinaje lo llaman ser libre de la religiosidad.
- Al caerse al suelo y temblar lo llaman mover de Dios.
- Al llenar estadios le llaman avivamiento.
- A la palabrería llena de augurios la llaman palabra profética.
- Al deseo de poder lo llaman tener una visión grande.
- Al robo descarado usando los medios de comunicación lo llaman pactar con Dios o sembrar en el reino.
- A los que denuncian el pecado los llaman fariseos modernos.
- A las falsas doctrinas las llaman revelaciones apostólicas.
- A los antros disfrazados de iglesia las llaman reunión de jóvenes cristianos.
- A lobos rapaces los llaman apóstoles.
- A las congregaciones que no instauran el G-12 las llaman grupos sin visión.
- A la metafísica la llaman confesión positiva.
- Al orgullo lo llaman hacer las cosas con excelencia “para Dios”.
- A las fábulas las llaman atar el espíritu de adulterio, alcoholismo y narcotráfico.
- A hacerse rico a costa de los cristianos le llaman concierto “para la gloria de Dios”.
- A cobrar la entrada a una reunión cristiana le llaman gastos de recuperación.
- A cobrar un caché por cantar o predicar en un Congreso le llaman “el obrero es digno de su salario”.
- A reprender el pecado y las conductas erradas le llaman murmuración.
- A la impunidad eclesiástica la llaman “no toquéis al ungido”.
- Al materialismo lo llaman prosperidad divina.
- Al show milagrero lo llaman manifestación del poder de Dios.
- A una jauría de lobos rapaces la llaman cumbre de apóstoles y profetas.