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Alemania se ve día a día invadida por la Violencia Xenófaba

El Gobierno alemán ha subrayado este lunes que tanto la canciller, Angela Merkel, como el resto de su equipo condenan «en términos rotundos» la violencia contra refugiados en la ciudad de Heidenau, que ha considerado «repugnante», según informa Europa Press.

«Es repugnante que activistas de extrema derecha y neonazis intenten extender su mensaje de odio junto a un refugio para solicitantes de asilo», ha afirmado en rueda de prensa el portavoz gubernamental, Steffen Seibert.

Al menos 31 policías resultaron heridos por choques con unos 600 manifestantes a primera hora del sábado. Durante la protesta, convocada por la llegada masiva de extranjeros, parte de los asistentes lanzaron botellas y piedras contra las fuerzas de seguridad.

Son imágenes que se han convertido en habituales en los informativos y diarios de Alemania durante este verano: grupos de neonazis y militantes de extrema derecha, mezclados con ciudadanos que apoyan y justifican la presencia de los xenófobos, se reúnen ante los centros de refugiados para amedrentar a los peticionarios de asilo. En algunas ocasiones, los manifestantes incluso atacan con piedras y cócteles molotov los centros pese a la presencia de policías antidisturbios. Otras veces, los ataques se producen por la noche y sin previo aviso.

Alemania está viviendo un verano caliente. Algunos incluso lo comparan con el vivido en 1992, cuando la oleada de refugiados llegados a Alemania huyendo de la guerra de los Balcanes acabó desembocando en una serie de pogromos contra extranjeros y refugiados en el este del país. Imágenes de vergüenza en la historia moderna de Alemania, tal y como apuntan la prensa y los políticos del país; y unas imágenes que despiertan los fantasmas del racismo latente en buena parte de la sociedad germana, especialmente de algunas regiones del Este del país, donde los movimientos y partidos de extrema derecha tienen históricamente un fuerte enraízamiento.
Heidenau.

neonazis

La actual ola de violencia xenófoba ha alcanzado este fin de semana una nueva cota: cientos de neonazis se enfrentaron a la policía durante dos noches consecutivas frente a una centro de acogida de refugiados situado en la ciudad de Heidenau, cerca de Dresde, la capital del Estado oriental de Sajonia. Decenas de agentes de policía resultaron heridos. Las imágenes de cócteles molotov y piedras, regadas con eslóganes racistas, recuerdan mucho a las de Rostock-Lichtenhagen, un barrio de la ciudad norteña en el que una turba de ultraderechistas, neonazis y ciudadanos desencantados con la dura situación económica que se vivía en la región tras la reunificación del país atacaron un centro de acogida a finales de agosto de 1992.

En esta ocasión, uno de los detonantes de los enfrentamientos fue la convocatoria de una marcha por el partido neonazi NPD (Partido Nacionaldemócrata de Alemania), una de las formaciones políticas que intenta obtener capital político con la enorme llegada de refugiados durante este año. Una llegada que se mantendrá durante 2015: el Ministerio de Interior alemán informó esta misma semana que prevé que el año cierre con la cifra récord de 800.000 solicitudes de asilo. El vicecanciller alemán, el socialdemócrata Sigmar Gabriel, no dudó este domingo en calificar la ola de inmigrantes como el mayor reto que afronta el país desde su reunificación en 1990.
Violencia xenófoba

Aunque la presencia de la extrema derecha en los territorios orientales correspondientes a la desaparecida República Democrática Alemana es históricamente muy fuerte, el resto del país tampoco se salva de la nueva ola de violencia xenófoba. Un ejemplo: el incendio probablemente provocado este agosto en una pensión de la localidad bávara de Reichertshofen en la que estaba previsto alojar a refugiados. Aunque todavía no se ha esclarecido lo ocurrido, la Fiscalía alemana sospecha que el partido de extrema derecha Der III. Weg («La tercera vía», en alemán) está detrás del incendio. La Fiscalía ve al partido como un elemento peligroso que contribuye a crear un ambiente de violencia contra refugiados y extranjeros.

Un vistazo al programa político de Der III. Weg no deja lugar a dudas: la formación persigue la creación de «socialismo alemán» (una eufemística referencia al nacionalsocialismo del Tercer Reich erigido por Adolf Hitler); el «mantenimiento de la identidad nacional del pueblo alemán», en presunto peligro por «el abuso del derecho de asilo»; el «desarrollo de la sustancia biológica del pueblo» y la «recuperación de las fronteras soberanas» previas al fin de la Segunda Guerra Mundial porque, como dice el partido neonazi, «Alemania es más grande que la República Federal Alemana».

Como apuntan algunos observadores de este nuevo partido ultraderechista, Der III. Weg tiene presencia tanto en Alemania occidental como en territorios orientales. Un dato que apunta que la ola xenófoba contra los refugiados es territorialmente transversal y un fenómeno violento que amenaza a todo el país por igual.

Fuente: ABC Internacional

Lutero y sus anhelos antisemitas

Al leer esta bitácora te sorprenderás al enterarte que aquel reconocido teólogo, fundador de una nueva corriente religiosa mundial, y considerado por muchos como el padre del moderno alemán, Martín Lutero, escribió en 1543 escribirá lo que es considerado el primer tratado moderno antisemita. Me estoy refiriendo a: “Sobre los judíos y sus mentiras”, escrita por su pluma en el año 1543.
Primeramente será bueno aclarar que Lutero vivió en una época antisemita muy fuerte. Los judíos eran discriminados, vivían en guetos y su campo laboral estaba fuertemente restringido. Según su arbitrio, y necesidad, el soberano los gravaba con impuestos especiales, o en ocasiones desterraba a todos los judíos de su territorio. Estos tenían que huir a otras regiones, donde vivían hasta el siguiente destierro. Los comerciantes y banqueros locales se liberaban así de competidores no deseados con la complicidad de sus gobernantes. El antijudaísmo de este tiempo se expresa, aparte de las olas de expulsiones, también en representaciones como el así llamado «puerco judío» en Wittenberg.
El reformista alemán, influenciado por esta ambiente sociocultural, sostenía que debían quemarse todas las sinagogas judías, destruir sus libros de oración, prohibir predicar a los rabinos, “aplastar y destruir” sus casas, incautarse de su propiedades, confiscar su dinero y obligar a esos “gusanos venenosos” a realizar trabajos forzados o expulsarlos “para siempre”. Lean con atención sus resentidas palabras antisemitas:
“Primero, sus sinagogas o iglesias deben quemarse… En segundo, sus casas deben asimismo ser derribadas y destruidas… En tercer lugar, deben ser privados de sus libros de oraciones y Talmudes en los que enseñan tanta idolatría, mentiras, maldiciones y blasfemias. En cuarto lugar, sus rabinos deben tener prohibido, bajo pena de muerte, enseñar jamás… La furia de Dios contra ellos es tan grande que están cada vez peor… Para resumirlo, estimados príncipes y nobles que tenéis judíos entre vuestras posesiones, si mi consejo no os es suficiente, buscad otro mejor para que vosotros, y todos nosotros seamos libres de esta insoportable carga diabólica”. 
El anhelo más grande que tenía Lutero en su corazón era que los judíos desaparecieran de Alemania y Europa. Por ello, llegó a afirmar:
“¿Quién les impide a los judíos volver a Judea? Nadie… Les proveeremos todas las provisiones para el viaje, para vernos por fin libres de ese repulsivo gusano. Para nosotros, ellos son una grave carga, la calamidad de nuestra existencia. Son una peste enclavada en nuestras tierras”. 
En opinión del historiador Dr. Robert Michael, parece ser que Lutero aprobaba el asesinato de judíos.
“Yo les arrancaría la lengua de la garganta. Los judíos, en una palabra, no deben ser tolerados”. 
También les acusa de dedicarse al hurto y a la usura.
“Si no fueran tan ciegos, su despreciable vida externa los convencería de la verdadera naturaleza de su penitencia. Ya que abunda en brujería, signos de magia, figuras y el tetragrama del nombre, eso es, con idolatría, envidia y vanidad. Además, no son más que ladrones y asaltantes que diariamente no prueban bocado y visten ropa que nos han robado y hurtado por medio de su maldita usura. De este modo viven día a día, junto con esposa e hijo, de robo y hurto, como archiladrones y asaltantes, en total impenitente seguridad. Para un usurero es un archiladrón y asaltante que debería ser colgado en la horca siete veces más alto que otros ladrones. En efecto, Dios debería profesar desde el cielo sobre tal hermosa penitencia y mérito a través de su santo ángel y volverse flagrante, mentiroso blasfemo por el bien de la sangre noble y los santos circuncisos que se jactan de ser santificados por los mandamientos de Dios, a pesar de que los pisotean a todos y no conservan ni a uno de ellos”. 
No debemos olvidar que cuatro siglos después de haber sido escritos, los nazis citaron los ensayos de Lutero para justificar la Solución Final. Mas aún algunos estudiosos han atribuido la «Solución Final Nazi«, directamente a Martín Lutero, aunque haya algunos que refutan esta apreciación. Lo real es que los jerarcas nazis llevados a juicios durante el Tribunal de Crímenes de Guerra de Nuremberg del año 1946, alegaron en verdad que ellos no habían hecho otra cosa más que ejecutar lo que Martín Lutero había ordenado cuatro centurias antes, «la exterminación del pueblo judío». Hitler, como todo hábil político, utilizó el escrito de Lutero contra los judíos para influir negativamente en el pueblo alemán, en aquel entonces, mayoritariamente luterano, por lo que hizo reimprimir y repartir el libro de Lutero.

Un Hecho Increíble: Freud sugirió que Adolfo Hitler fuera tratado como Niño con Problemas Mentales.

Un muchachito austríaco de seis años y gesto desafiante, el mentón elevado y la mirada firme, las piernas abiertas, los brazos cruzados, algo diferente del resto de sus compañeros de colegio, cambió con el tiempo la historia de Europa.
Hijo de Alois, un funcionario de aduana, y de Klara, una sufrida ama de casa, en 1895 Adolf Hitler no representaba nada, para el poder de Guillermo II en Alemania ni para el de Francisco José I, monarca del imperio austrohúngaro. Después de todo, sólo se trataba de un pequeño escolar que suficientes problemas ya tenía en su casa como para preocupar a tan importantes personajes que en aquellos días continuaban decidiendo el destino de gran parte del mundo, ya que sus guerras y reconciliaciones, sus tratados y sus ambiciones tenían un impacto profundo más allá de las fronteras, hasta ultramar.
Una reciente investigación reveló que el mismísimo Sigmund Freud había recomendado internar al niño Adolf en un instituto de salud mental, cuando éste tenía sólo seis años.
El estudio fue realizado por el escritor británico, Laurence Marks, estudioso del psicoanalista judío y de sus obras, quien además reveló las pesadillas que atormentaban al dictador por las noches.
Según su historia, las conductas impropias para un chico normal de clase media austríaca y horribles pesadillas nocturnas que se repetían cada noche llevaron al médico de la familia Hitler, el doctor Ernest Bloch, a consultar con un especialista para saber qué hacer con el paciente que soñaba con monstruos malignos, caídas hacia abismos profundos y negros como la noche y persecuciones en las que invariablemente era capturado y azotado hasta desear la muerte.
Metódico como la mayoría de sus compatriotas, el doctor Bloch, de origen judío, dejó constancia en varios escritos hallados por Marks, de la consulta realizada a otro judío, el propio Freud, que fue terminante en el diagnóstico: «internación y tratamiento».
En esos sueños, el pequeño Adolf padecía los tormentos de caer en abismos profundos y persecuciones en las que era capturado y azotado hasta desear la muerte. Todo esto, acompañado por conductas inapropiadas.
Fue el padre inflexible de Adolf, Alois, quien rechazó el consejo de Freud. Según Marks, lo decidió así para evitar cualquier examen médico que evidenciara el maltrato psicológico y físico que sufría su hijo.
«Le gustaba humillar a su hijo. En una muestra de rebelión, Adolf, entonces de seis años, trató de escapar de su casa durante la noche, saltando por una ventana. Se desvistió para salir con menos ruido, pero quedó enganchado. Su padre lo oyó y llamó al resto de la familia para que se rieran de él. Adolf lloró durante tres días«, relata Marks en su estudio. De este modo, a causa del destino marcado por voluntad paterna, es decir, que su hijo llegara a ser, como él, un funcionario del Estado, impidió que el niño fuese tratado con resultados que bien podrían haber alterado el curso de la historia mundial.
En los años de más temprana formación, la conducta de Hitler no ocasionaba penurias más que a su familia, especialmente a su madre. Según Allan Bullock, historiador y autor de una importante biografía del Führer , publicada en 1952, la crisis psicológica sólo hizo eclosión en la vida de Hitler entre 1907 y 1908, a la edad de 18 años, cuando fue rechazado dos veces por la Academia de Artes de Viena.
El historiador Bullock, de todas maneras, dice que las teorías sobre los orígenes de la insania mental, e incluso la existencia cierta de esa enfermedad, aún lo intrigan. Se pregunta: ¿fue Hitler realmente un enfermo mental, y en caso de que lo haya sido, qué lo hizo capaz de acumular semejante poder, a pesar de ello?
«Vaya a cualquier asilo para locos y seguramente encontrará a alguien que cree tener una misión especial de conquistar el mundo. Esas personas no llevan adelante esa supuesta misión. La pregunta por responder es: ¿cómo hizo Hitler para ponerla en práctica?», dice, sin que hasta el momento alguien haya aventurado una respuesta irrefutable.
Las investigaciones realizadas por Laurence Marks pusieron al desnudo ciertas curiosidades. Por ejemplo, que Adolf Hitler nunca olvidó al médico de su familia. Cuando, en 1938, Alemania invadió y anexó Austria, Martin Bormann recibió instrucciones precisas del máximo jerarca nazi: preservar a Ernest Bloch, otorgándole un salvoconducto para huir a Suiza.
En definitiva, Hitler le salvó la vida a un judío, a pesar de que el judaísmo era el centro de su teoría fantástica acerca de las razas, y el blanco principal de la furia homicida que desató en Europa. Precisamente él, un enemigo demencial de los judíos, estuvo a punto de no quedar en la memoria como el autor intelectual y material del mayor genocidio en la historia europea, y haber sido un anónimo pintor de brocha gorda, o bien un oscuro funcionario del Estado austríaco, merced a la intervención bien intencionada de dos judíos: Ernest Bloch y Sigmund Freud.
Pero no fue así. El mundo lo sabe.
FuenteLa Nación

Hitler fue un superadicto a drogas con el fin de convertirse en el superhombre

Cuenta la historia que Adolf Hitler, en su intento por verse ante sus seguidores como el ejemplo perfecto del ‘superhombre nazi’, se volvió adicto a las drogas, llegando a consumir cócteles de hasta 80 fármacos, según informes de su médico personal hallados recientemente.
Si iba a gobernar el mundo, para el líder supremo era necesario demostrar que él era el espécimen perfecto, el modelo de la virilidad masculina y no despertar sospechas sobre sus problemas mentales y de salud. Sin embargo, ocultarlos era una tarea difícil, por lo que el padre de la ‘raza superior’ abusaba de las drogas, informa el diario británico ‘The Mirror’, citando cartas y registros médicos del doctor personal de Hitler.
Según la información, su médico de cabecera el Dr. Theodore Morell suministraba a Hitler un cóctel de más de 80 fármacos, que incluían vitaminas y probióticos con semen de toro, veneno para ratas e incluso aceite para limpiar armas.
En los documentos se indica que Hitler sufría, entre otras dolencias, de un eczema crónico, persistentes dolores estomacales y flatulencia, para lo cual Morell le prescribió bacterias vivas que aliviaron efectos como los calambres que lo aquejaban.
Las tropas aliadas encontraron en la residencia del canciller un armario repleto de medicamentos, que contenía además un aceite de limpieza de pistolas y píldoras para la flatulencia a base de veneno para ratas.
De acuerdo con los informes médicos encontrados, otros doctores de Hitler especularon que Morell lo estaba envenenando, pero fueron despedidos por el Führer calificándolos de “tontos”.
Asimismo, los documentos indican que Hitler recurrió a la cocaína para aliviar dolores del pecho, garganta e incluso utilizó gotas oculares que contenían un 10% de esta droga.
Y como si fuera poco, el ‘superhombre nazi’ también recibió inyecciones para la virilidad que contenían extractos de glándulas de testículos de toros jóvenes, o semen de estos animales para aumentar su deseo sexual y poder mantenerse al día con las exigencias de su joven amante.
También se documenta que cuando Hitler iba a mantener una reunión con el dictador italiano Benito Mussolini fue “altamente drogado” para controlar su hiperactividad, y lo mismo hacía en otras ocasiones para disminuir la presión arterial.

El Dr. Theodor Morell tenía un diario médico acerca de las drogas, vitaminas y otras sustancias que administraba a Hitler, usualmente en forma de inyección o en píldoras. La Mayoría eran preparaciones comerciales, algunas eran suyas. Ya que algunos de estos compuestos son considerados tóxicos, muchos historiadores han especulado que Morell contribuyó accidentalmente a la frágil salud de Hitler. Ésta es una lista de algunas de las sustancias que Theodore Morell administraba a Hitler:
Bromato de Potasio
Nux Vomica
Atropina
Barbitúrico de Sodio
Tartrato de Oxedrina
Manzanilla
Testosterona
Profenazona
Cafeína
Belladona
Escherichia coli
Dihidroxicodeína
Sulfinamida
Cocaína (en forma de gotas para los ojos)
Enzimas
Vitaminas
Anfetaminas
Metanfetaminas
Proteínas y lípidos derivados de tejidos y grasas animales.

Hitler y su campaña contra personas con discapacidad mental

En diversas partes de Europa, 75.000 personas fueron asesinadas antes o durante la Segunda Guerra Mundial por tener discapacidades mentales o físicas, que no encajaban con los ideales arios nazis. Los asesinatos eran parte de una campaña ordenada por Adolf Hitler.

Cientos de esqueletos han sido exhumados de un cementerio de la era nazi que se presume contiene restos de personas discapacitadas mental o físicamente que fueron víctimas de asesinatos en masa. Muchos de los huesos al parecer fueron fracturados por personal médico, afirmó un antropólogo.
George McGlynn dijo que cerca de un tercio de los 221 esqueletos han sido examinados, y que la mitad de ellos (unos 35) tenían costillas rotas. Otros tenían narices o clavículas fracturadas.
Desde hace tiempo se sospechaba que los restos, exhumados en los últimos siete meses del cementerio de un hospital en desuso en la ciudad de Hall, en el este de Innsbruck, eran de personas asesinadas por los nazis debido a sus discapacidades físicas o mentales.
McGlynn afirmó que aún no podía confirmar si fueron asesinados, aunque las fracturas probablemente eran resultado de agresiones que sufrieron en el hospital. «Dudo que resultaran directamente en fallecimiento», sostuvo.
De acuerdo con la agencia de noticias Austrian Press Agency, el antropólogo dijo que ninguna de las fracturas se enlistó en los historiales médicos de los fallecidos, un fuerte indicio de que tales lesiones ocurrieron después de que fueron internados en el hospital.
McGlynn dijo previamente este año que los exámenes iniciales habían mostrado que los restos eran de personas que tenían discapacidad física o mental. Funcionarios indicaron que sus edades iban desde los 14 años hasta más de 90, con una proporción pareja de géneros.
Agregaron que se hacen intentos para establecer contacto con los descendientes y con personal del hospital que aún vive.

Las razones del asesinato de los discapacitados.
La guerra, según Adolf Hitler, «era el mejor momento para eliminar a los enfermos incurables«. Muchos alemanes no querían recordar que había individuos que no cuadraban con su concepto de una «raza superior«. Las personas con discapacidades físicas y mentales eran vistas como «inútiles» para la sociedad, una amenaza para la pureza genética aria y, en última instancia, no merecían la vida. Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, las personas que sufrían retrasos mentales, discapacidades físicas o enfermedades mentales eran perseguidas para asesinarlas en el marco de lo que los nazis llamaban programa «T-4» o de «eutanasia».
El programa de «eutanasia» requería la cooperación de muchos médicos alemanes que revisaban los expedientes médicos de los pacientes de instituciones para determinar qué personas con discapacidades o enfermedades mentales debían ser asesinadas. Los médicos también supervisaban los asesinatos reales. Los pacientes condenados eran transferidos a seis instituciones de Alemania y Austria, donde eran asesinados en cámaras de gas construidas especialmente para ese fin. Los bebés y los niños pequeños que tenían discapacidades también eran asesinados mediante una dosis letal de drogas o por inanición. Los cuerpos de las víctimas eran quemados en grandes hornos a los que se llamaba crematorios.
Pese a las protestas públicas de 1941, la dirigencia nazi continuó en secreto con este programa durante toda la guerra. Unas 200.000 personas discapacitadas fueron asesinadas entre 1940 y 1945.
El programa T-4 se convirtió en el modelo para el asesinato en masa de judíos, romaníes (gitanos) y otros grupos en campos equipados con cámaras de gas que los Nazis abrirían en 1941 y 1942. El programa también sirvió como capacitación para los miembros de las SS que se hacían cargo de estos campos.
Fechas claves de esta política satánica.
OCTUBRE DE 1939
HITLER AUTORIZA EL EXTERMINIO DE LOS DISCAPACITADOS.
 
Adolf Hitler autoriza el comienzo del programa de «eutanasia»: el exterminio sistemático de aquellos alemanes a quienes los nazis consideraban «no merecedores de la vida». La orden data del comienzo de la guerra (1 de septiembre de 1939). Al principio se les recomienda a los médicos y al personal de los hospitales que descuiden a los pacientes. Entonces, los pacientes mueren por inanición y por enfermedades. Más tarde, hay grupos de «asesores» que visitan los hospitales y deciden quién va a morir. Esos pacientes son enviados a varios centros de exterminio donde se aplica la «eutanasia» ubicados en la Gran Alemania y son asesinados con inyecciones letales o en cámaras de gas.
3 DE AGOSTO DE 1941
UN OBISPO CATÓLICO DENUNCIA LA EUTANASIA.
En 1941, el programa supuestamente secreto de «eutanasia» llega al conocimiento público en Alemania. El obispo Clemens August Graf von Galen de Muenster denuncia los asesinatos en un sermón público el 3 de agosto de 1941. Otras figuras públicas y clérigos también plantearán objeciones a los asesinatos.
24 DE AGOSTO DE 1941
HITLER ORDENA OFICIALMENTE TERMINAR CON LOS ASESINATOS MEDIANTE «EUTANASIA».
Las crecientes críticas del público respecto al programa de «eutanasia» empujan a que Adolf Hitler ordene ponerle fin al programa. Las cámaras de gas de los diversos centros de exterminio donde se aplica la «eutanasia» son desmanteladas. Para entonces, unos 70.000 pacientes con discapacidades físicas o mentales de origen alemán y austríaco habían sido asesinados. Si bien el programa de «eutanasia» queda oficialmente terminado, el asesinato de personas con discapacidades físicas o mentales continúa en secreto en casos individuales.

Europa resucita en sus lineamientos de extrema derecha

 

El reciente doble atentado en Noruega,
 que causó la muerte a 76 personas, ha vuelto a llamar la atención del
peligro que representa la ultraderecha, no solo en los países
escandinavos, que hasta ahora eran modelos de tolerancia religiosa y
confianza multicultural, sino en toda Europa y hasta en EE. UU.
La oposición hacia los inmigrantes (especialmente contra los
musulmanes), la globalización, y el multiculturalismo ha demostrado ser
una poderosa fuerza política, y en algunos casos hasta un incentivo a la
violencia.

Pese a que los partidos políticos modernos no son proclives a la
violencia, no son raros los casos en los que representantes de fuerzas
derechistas en un arrebato populista empiezan a pregonar la necesidad de
defender la genuina identidad nacional, alentando de tal forma
conductas violentas y odios hacia las minorías inmigrantes, señalan los
expertos.


Hay que destacar que el número de los ataques antiinmigrantes ha
aumentado considerablemente en toda Europa, y sobre todo en los países
nórdicos en los últimos años. En noviembre pasado, un ciudadano sueco
fue detenido en la ciudad de Malmö (sur de Suecia), por su presunta
relación con los tiroteos de más de una docena de inmigrantes,
incluyendo uno mortal.

Por otro lado, una tendencia que se viene observando desde hace algunos
años en los países escandinavos tiene que ver con la mayor
participación política de la extrema derecha en las instituciones. El
partido ultraderechista Demócratas de Suecia, por ejemplo, entró en el
Parlamento del país por primera vez, después de obtener el 5,7 % de los
votos en las elecciones generales del pasado mes de septiembre. En la
política noruega la extrema derecha también ha escalado posiciones y
está representada por el Partido del Progreso, que en las elecciones
generales del 2009 obtuvo el 23% de los votos.

La masiva llegada de refugiados, ávidos de asilo político, y de
numerosos inmigrantes económicos también provocaron una feroz reacción
de la extrema derecha en países como Dinamarca, donde el Partido Popular
Danés tiene 25 de los 179 escaños del Parlamento, y los Países Bajos,
donde el partido de Geert Wilders para la Libertad ganó el 15,5% de los
votos en las elecciones del 2010.

No se trata solo de una zona geográfica en particular, el escenario
ultraderechista se ha ampliado drásticamente gracias a las altas
tecnologías, y cada vez hay más foros y debates, también en Internet,
donde prolifera el odio xenófobo.

FuenteActualidad RT

La potestad ultraderechista gana fuerza en Europa

«Un fanático es alguien que no puede cambiar su opinión y no quiere
cambiar de tema
«. Estas son las palabras de uno de los británicos más
famosos de la historia, Winston Churchill, quien lucho junto a su pueblo
contra el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial. Pero hoy en día
parece que en el Reino Unido los movimientos con ideologías tan
radicales como el nacionalismo tienen cada vez más influencia.

Anders Breivik, el autor del terrible ataque
que dejó decenas de víctimas mortales en Noruega, afirma estar
vinculado con La Liga Inglesa de la Defensa: un movimiento antiislámico
de Gran Bretaña. Sin embargo esta organización rechaza su conexión con
el noruego, aunque algunos expertos señalan que en el país británicohay
bastante gente que comparte sus ideas y que podrían intentar repetir sus
acciones.

 Jonathan Birdwill, miembro del grupo de estudio del extremismo, DEMOS,
teme que haya muchas personas que quedarán impactadas por el manifiesto
de Breivik. «En los próximos meses o años veremos a otros que querrán
repetir ataques similares», dice el analista.

El primer ministro del Reino Unido, David Cameron ya ha dicho (al igual
que su colega alemana Angela Mekel), que la política del
multiculturalismo ha fracasado. Uno de los principales objetivos ahora
para ciertos gobiernos (según los analistas) es no permitir que sus
ciudades se conviertan en los campos fértiles donde los brotes de
neonazismo crezcan y sean cada vez más fuertes. Algo que ya está
teniendo lugar.

Esto se puede constatar en la red. A pesar de la violenta masacre que
cometió Anders Breivik, unas 3 mil personas han votado a favor de su
video publicado en YouTube. Varios expertos señalan que para los
ultraderechistas, el caso noruego es una razón para culpar otra vez a
los políticos de izquierda de todos “los pecados” de las sociedades
europeas.

Jonathan Birdwill, miembro del grupo de estudio del extremismo, DEMOS,
afirma que existen grupos que expresan sus condolencias y se separan de
Breivik, pero al mismo tiempo no tardan nada en echar la culpa en los
políticos izquierdistas, que según su opinión permitieron a los
inmigrantes entrar al país y de hecho han empujado a ese hombre a llegar
hasta el límite del borde.

Aunque los ultraderechistas británicos afirman no justificar las
acciones de Breivik, señalan que la gente en ocasiones se ve obligada a
tomar medidas extremas.

Stephen Lennon, ultraderechista británico, lider de la liga inglesa de
la defensa, explica el comportamiento de Breivik: «No es que yo quiera
justificar lo que hizo. No creo que nadie vaya a hacer lo mismo. Pero
cuando uno reprime el derecho de las personas a expresar su opinión,
reprime su voz, uno con eso puede crear problemas y las personas se ven
obligadas a pasar a realizar actos fuera de la legalidad».

Y esta tendencia actual se extiende no solo en el Reino Unido, sino a
lo largo de toda Europa. En los Países Bajos Geert Wilders (el político
que afirma luchar «por la libertad de su estado del Islam») dirige el
tercer partido más grande. El Partido Popular de Dinamarca (que aboga
por una política antiinmigrante) logró promover un proyecto para cerrar
las fronteras con Alemania y Suecia.

Los analistas afirman que los gobiernos europeos rara vez escuchan
atentamente la voz de pequeños pero muy activos colectivos de la
población y, que el caso noruego ahora ha obligado a los líderes
políticos a centrarse en ámbito migratorio.

Blanka Kolenikova, analista de IHS Global Insight, opina que
siempre hay grupos que están satisfechos y otros, que opinan que el
gobierno no hace bastante y no debate bastante este problema. «Me parece
que estos atentados en Noruega de nuevo pondrán el tema en el punto de
mira. Y harán que los funcionarios y la opinión pública se centren en
torno a él», dice Kolenikova.

En todo caso parece que Europa está en un cruce de caminos muy
peligroso. O bien ponerse una venda en los ojos y dejar que este tipo de
movimientos sigan cobrando fuerza, considerando ciertas tendencias y
atentados como hecho aislados. O bien plantearse un diálogo serio y
abierto en el que se intente buscar una solución al problema migratorio y
una convivencia tolerante entre las diferentes etnias.

FuenteActualidad RT

Masacre en Noruega: El espejo cristiano de al-Qaida

Asia Times Online
Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens
Imaginad si Anders
Behring Breivik, el pálido, rubio, 100% noruego de ojos azules, ultra
derechista loco por las armas, fundamentalista cristiano, responsable
por el atentado con el coche bomba en Oslo y los meticulosos asesinatos
selectivos en la isla de Utoya que mataron a 93 personas, hubiera sido un inmigrante musulmán. 

Ni
siquiera hay que imaginarlo – ya que los concéntricos círculos
occidentales de la industria de la islamofobia inmediatamente
atribuyeron la masacre en Noruega a “al-Qaida”, hasta que los hechos les
bloquearon el camino. 

Esperad un minuto. “¿Asesinatos
selectivos?” Tuvo que cruzar la mente del asesino que si el gobierno de
Barack Obama puede hacerlo – en AfPak, Iraq, Yemen, Somalia, todo en
nombre de la civilización occidental – no hay nada que impida que un
frío escandinavo ejerza los mismos derechos en su propio suelo. 

Los hilos superpuestos de la ideología de al-Qaida pueden ser examinados en detalle en volúmenes como Al-Qaeda in Its Own Words
[Al-Qaida en sus propias palabras], editado por Gilles Kepel y
Jean-Pierre Milelli, y publicado en inglés por Harvard University Press. 

El solitario Breivik también urdió su propio voluminoso manifiesto de odio de 1.500 páginas, titulado 2083: A European Declaration of Independence
[2083: Una declaración europea de independencia], en el que castiga por
igual al liberalismo, multiculturalismo y “marxismo cultural”, que
supuestamente están destruyendo la civilización cristiana europea. 

Tal
como al-Qaida –bajo la guía ideológica de su actual líder Dr Ayman
al-Zawahiri – se embarcó en una yihad defensiva (y ocasionalmente
ofensiva) contra cristianos y judíos, Breivik llama a nada menos que una
yihad cristiana para defender Europa contra otra invasión musulmana. 

El retorno de los cruzados cristianos

 Lo
que revela que Breivik no es un fenómeno aislado es que la ideología
detrás del manifiesto condena abrumadoramente no solo al Islam per se,
la inmigración musulmana en Europa, y el multiculturalismo, sino también
todas las diatribas neonazis, supremacistas radicales contra esos
“males”.
Breivik, el asesino masivo que ama las horrendas canciones de Eurovision y la serie policial estadounidense The Shield
[El escudo], y posee licencias legítimas para una pistola Glock, un
rifle automático y una escopeta es un converso de la nueva, algo más
sofisticada narrativa de la derecha pan-europea – según la cual la
batalla por el alma de Europa será librada por motivos culturales. 

Después de una breve visita a Dinamarca y al sur de Suecia en el otoño de 2010, ya había mencionado esos temas más amplios en Carta de Islamofobistán (Rebelión, 25 de octubre de 2010). 

Breivik
va un paso más lejos al transformar en armas el nuevo pensamiento –
según el cual no se trata de que los musulmanes sean biológicamente
inferiores a Occidente Cristiano; el problema es que los dogmas del
Islam son absolutamente incompatibles con Occidente. 

Todo tiene
que ver con cultura. “Ellos” no comparten “nuestros valores” y nuestro
modo de vida. En su astuta acción de relaciones públicas, esta
explicación culturalista probablemente atraerá incluso a europeos
moderados. 

Breivik y su calaña culpan a la democracia
parlamentaria occidental en su conjunto –incluida la corrección
política– por permitir que los musulmanes en Europa se establezcan como
caballos de Troya. Todo y cada cual es una amenaza – desde al-Qaida a la
burocrática Unión Europea (UE) y las multiculturales Naciones Unidas
(ONU). Breivik y su especie son Huntingtonescos hasta no poder más –
temen un choque de civilizaciones en su propia casa. 

No es
ninguna maravilla que el siguiente paso lógico haya sido la
transformación de Breivik en una versión moderna de los Caballeros
Templarios ensalzada en su extravagante manifiesto – para así dar el
ejemplo. El programa del Caballero: “tomar el control político y militar
de los países europeos occidentales e implementar un programa político
cultural conservador”. 

“Al-Qaida” – o la nebulosa de
franquicias y copiones comúnmente presentados en un lote como “al-Qaida”
– no tiene los recursos para atacar Europa, y en todo caso no es su
prioridad; la prioridad es AfPak, Asia Central e India, como lo detalla
el comandante militar de al-Qaida Ilyas Kashmiri. Pero la prioridad del
terror cristiano fundamentalista es definitivamente Europa. Y los
ataques tendrán lugar a través de misántropos como Breivik así como de
grupos organizados. 

Los progresistas occidentales deben estar
en alerta roja. Habrá que destrozar tabús – especialmente al identificar
las retorcidas, pero casi siempre burdas estrategias, empleadas por el
fundamentalismo cristiano de ultraderecha y los sionistas para fomentar
la islamofobia en Occidente. Por ejemplo, tanto los islamófobos como los
sionistas de la línea dura consideran que la subyugación de Palestina
por los israelíes, es la defensa de Israel en un choque de
civilizaciones. El discípulo modelo, Breivik, aclama a islamófobos
estadounidenses tristemente célebres como Pam Geller y Daniel Pipes de
la misma manera como aborrece el apoyo noruego a un Estado palestino
independiente y soberano. 

Breivik escribió: “Es muy hipócrita
tratar a musulmanes, nazis y marxistas de un modo diferente los unos de
los otros. Son todos partidarios de ideologías de odio. No todos los
musulmanes, nazis y marxistas son conservadores: la mayoría son
moderados. ¿Pero importa? No importa: el fascismo es un
seductor que ofrece igualdad de posibilidades. Habrá sangre – mucha más
sangre, mientras Europa enfrenta su propio corazón de las tinieblas
«.
Cuidado con el retorno –en masa– del pálido cruzado cristiano de ojos
azules. 

Pepe Escobar es autor de “ Globalistan: How the Globalized World is Dissolving into Liquid War ” (Nimble Books, 2007) y “ Red Zone Blues: a snapshot of Baghdad during the surge ”. Su último libro es “ Obama does Globalistan ” (Nimble Books, 2009). Puede contactarse con él en: pepeasia@yahoo.com .
 
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Los vengadores judíos

El 20 de septiembre de 1944 entró en
acción la primera Brigada Judía del ejército britá­ni­co bajo bandera hebrea:
The Jewish Brigade Group. 
En noviembre fue destinada al frente de ba­talla
de Italia; la mayor parte de sus miembros te­nían aún familiares tras las
líneas alemanas. En mayo de 1945, al final de la guerra, la brigada per­manecía
estacionada en la ciudad italiana de Tar­visio, cerca de la frontera con Austria.
Sus miem­bros estaban deseosos de formar parte de las Fuerzas de Ocupación
Aliada en Alemania, pe­ro una orden, posiblemente del alto mando bri­tánico,
los obligó a detenerse. A muchos sol­da­dos se les dio permiso para buscar a
sus fa­mi­lia­res, pero lo que encontraron fueron lugares co­mo
Auschwitz-Birkenau, Mauthausen o Ber­gen-Belsen.
Al regresar a su base, el deseo de
venganza era muy fuerte en todos ellos. Con la ayuda de los servicios de
inteligencia de Estados Unidos y de Inglaterra, prepararon listas de miembros
de la SS.
En julio de 1945, un escuadrón de ejecu­to­res
cruzó la frontera de Austria. Los judíos de­tu­vieron a una pareja; la mujer
reconoció que su tra­bajo había sido el de clasificar todas las per­te­nencias
de valor requisadas a judíos de Italia y Aus­tria. Cuando iban a ser ejecutados
de un tiro en la nuca, el hombre se ofreció para ayudar a los vengadores a
cambio de la vida de ambos.
Al día siguiente, el escuadrón tenía en su
po­der una lista de treinta nombres de vecinos que habían sido miembros de la
Gestapo y de la SS con sus fechas de nacimiento, estudios, mi­sio­nes y
funciones en el ejército alemán. Dis­fra­za­dos de policías militares, los
vengadores se de­dicaron a detener a todos los que aparecían en la lista. Tras
leerles los cargos, eran ejecu­ta­dos mediante estrangulamiento.
El equipo de vengadores estaba formado por
Israel Karmin, Maier Shorea y Haim Harkov. El ejecutor era Shev Kerem, quien
años des­pués se uniría al recién nacido Mossad. La uni­dad actuaba siempre en
un radio de acción de cien kilómetros alrededor de Tarvisio, sus ope­ra­ciones
se realizaban cerca de lagos , ríos o pre­sas, y no dejaban ningún rastro de
sus pasos por esas zonas. Su única meta era ejecutar al mayor nú­mero de
asesinos nazis. La unidad de ejecu­to­res judíos solo actuó durante unos meses,
y ja­más se supo el número de nazis muertos.
Poco después, mientras los aliados comen­za­ban
a poner en libertad a muchos de los pri­sio­neros de guerra, los judíos
pensaron, sin equi­vocarse, que las naciones vencedoras que­rían pasar la
página, pero ellos no estaban dis­pues­tos a aceptarlo. Tuvia Friedman, Manus
Ya­mian y Alex Anielevicz, hermano del legendario Mor­dejai del gueto de
Varsovia, decidieron unir­se en Viena para formar su propio grupo de jus­ti­cieros..
Los miembros de ese grupo realizaron ta­reas policiales como detener a los
antiguos miem­bros de la SS, la Gestapo y jueces nazis con cargos de crímenes
de guerra. Fue conde­na­do y ejecutado por ese grupo Wilhelm Stuckart, uno de
los autores de las leyes de Nú­rem­berg cuyo trabajo consistió en proporcionar
un marco legal para la “Solución final”. También es­taban Alexander Laak,
responsable de la muer­te de cien mil judíos de Estonia, y Otto Abetz, ex
embajador alemán en Francia, quien ha­bía deportado gran cantidad de judíos
fran­ce­ses a los campos de exterminio.
Este es solo un pequeño recuento de las ac­ti­vidades
de los vengadores. Las misiones lle­va­das a cabo por este grupo continúan
siendo un mis­terio, así como el número de nazis ejecu­ta­dos.
Epílogo

Las historias, documentos y testimonios de so­bre­vivientes que se obtuvieron
después de la Se­gunda Guerra Mundial desmienten la leyenda ne­gra de que los
judíos fueron como ovejas al ma­tadero. 
Los judíos pelearon contra los nazis co­mo
nadie. Tenían muy pocas armas que fue­ron difíciles de conseguir. El
antisemitismo del am­biente en que actuaban no ayudó mucho a la re­sistencia
judía; sin embargo, hubo entre vein­te mil y treinta mil partisanos judíos en
los bos­ques de Polonia y Rusia Blanca.
Se produjeron le­vantamientos en las
ciudades y en los campos de exterminio. El levantamiento del gueto de Var­sovia
fue uno de los actos más heroicos de la gue­rra, y pasó a ser el símbolo de la
resistencia ju­día. También hubo rebeliones en muchos otros guetos. Si no hubo
más fue porque no se pu­do. Después de dos mil años de pasividad, los ju­díos
demostraron que no pueden ser ani­qui­la­dos sin consecuencias para los
ejecutores.

Mordechai Anielevicz, Antek (Isaac) Zu­ker­man, Simja “Kasik” Rotem, Tuvia
Altman, Ma­rek Edelman, los hermanos Bielski, Abba Kov­ner, Emanuel Ringenblum,
Jaim Kaplan, Janus Korc­zak y muchos otros, han pasado, junto con los macabeos,
a formar el altar de los héroes ju­díos de todos los tiempos. Y esta es solo
una pe­que­ña parte de la historia.

¡Todos sabemos que estas reflexiones dicen la verdad!

Fidel Castro tacha de «nazifascista» el ataque de la OTAN contra Libia
La Habana, 28 abr (EFE)- El expresidente de Cuba Fidel Castro tachó hoy de «nazifascista» el ataque de la OTAN contra Libia y consideró que si Muamar el Gadafi «resiste y no acata las exigencias» de la Alianza Atlántica «pasará a la historia como uno de los grandes personajes de los países árabes«.
«Los groseros ataques contra el pueblo libio que adquieren un carácter nazifascista pueden ser utilizados contra cualquier pueblo del Tercer Mundo«, denunció Fidel Castro en un nuevo artículo divulgado hoy bajo el título «Un fuego que puede quemar a todos».

A su juicio, «se puede estar o no de acuerdo con las ideas políticas de Gadafi, pero la existencia de Libia como estado independiente y miembro de las Naciones Unidas nadie tiene derecho a cuestionarlo«.

En la última de sus «Reflexiones», Fidel Castro se declaró asombrado por la resistencia que Libia ha ofrecido.
«Ahora esa belicosa organización (la OTAN) depende de Gadafi. Si resiste y no acata sus exigencias, pasará a la historia como uno de los grandes personajes de los países árabes«, escribió el líder cubano.

Castro se refirió en su artículo a la reciente reunión mantenida en el Pentágono para hablar de la estrategia en Libia entre el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, y el ministro británico de Defensa, Liam Fox, quien a su juicio «estaba tenso, hablaba como un loco» y «daba la impresión de que escupía las palabras».

«Pocas veces vi algo más horrible; exhibía odio, frustración, furia y un lenguaje amenazante contra el líder libio, exigiendo su rendición incondicional. Se le veía indignado porque los aviones de la poderosa OTAN no habían podido doblegar en 72 horas la resistencia libia«, señaló.

Consideró que a Fox solo le faltó exclamar «lágrimas, sudor y sangre» como Winston Churchill pero «en este caso el papel nazifascista lo está haciendo la OTAN con sus miles de misiones de bombardeo con los aviones más modernos que ha conocido el mundo«.

«El colmo ha sido la decisión del Gobierno de Estados Unidos autorizando el empleo de los aviones sin piloto para matar hombres, mujeres y niños libios, como en Afganistán (…) pero esta vez contra un pueblo árabe y africano, ante los ojos de cientos de millones de europeos y nada menos que en nombre de la Organización de Naciones Unidas«, añadió Castro en sus «Reflexiones». EFE sam/cpy

Estados Unidos: Nazis refugiados después de la guerra…¡que cosa extraña!

EE.UU. dio refugio a nazis tras la guerra

Estados Unidos le habría ofrecido voluntariamente refugio a nazis alemanes después de la Segunda Guerra Mundialsegún lo establece un documento secreto del Departamento de Justicia norteamericano, informó el diario The New York Times.

El informe de unas 600 páginas, que las autoridades trataron de ocultar durante cuatro años, da nuevas pistas sobre estos hechos y establece, por ejemplo, que la CIA cooperó a sabiendas con colaboradores del régimen deAdolf Hitler en los años posteriores a la guerra para beneficiarse de sus conocimientos.
Según el informe, a Estados Unidos habrían ingresado desde Alemania mucho menos de los 10.000 nazis informados por las autoridades norteamericanas y que todo apunta a una “colaboración del gobierno con los perpetradores”, según citó el diario.
“Estados Unidos, que se había declarado como puerto seguro para los perseguidos, se convirtió, en menor medida, también en puerto seguro para los perpetradores”, agregó el rotativo. El informe también expone los logros y errores de una unidad de investigación especial del Departamento de Justicia para la persecución de nazis en Estados Unidos.
La unidad, integrada por abogados, expertos en historia y en criminalística, fue creada en 1979 para hallar a los secuaces de Hitler y expulsarlos del país. Unos 300 nazis fueron deportados desde su creación. En tanto, el grupo se fusionó con otra sección del Departamento de Justicia.
Vea aquí una versión completa del informe citado por The New York Times.

¡OTRA MÁSCARA QUE CAE: HITLER NO ERA NADA PURO!

Hitler habría tenido sangre judía y africana, razas que él consideraba inferiores y por lo cual intentó exterminar durante el Holocausto.

El líder nazi Adolf Hitler habría tenido sangre judía y africana, razas que él consideraba inferiores y por lo cual intentó exterminar durante el Holocausto.

Así lo reveló un estudio de ADN que se le realizó a 39 familiares del Führer, realizado por el periodista belga Jean-Paul Mulders y el historiador Marc Vermeeren, informó el diario británico The Daily Telegraph. 

En su investigación, Mulders y Vermeeren encontraron a familiares del líder nacionalsocialista, incluyendo a uno de sus primos, un campesino austríaco, cuyos análisis de ADN demuestran que tienen un cromosoma (llamado Halplogrupo E1b1b1) muy poco frecuente en Europa Occidental y que, sin embargo, sí se encuentra mucho más fácilmente en los habitantes originarios de Marruecos, Argelia y Túnez, así como en los judíos.

En efecto, el Haplogrupo E1b1b1 se encuentra en aproximadamente el 18 a 20 por ciento de los Ashkenazis y entre 8,6 y 30 por ciento de los Sefardíes, por lo que resulta ser el más común entre todos los linajes judíos.

«A partir de este supuesto se puede concluir que Hitler estaba relacionado con personas a las que él despreciaba», escribió Mulders en la revista belga Knack, que también publicó los resultados de esta investigación.

Por su parte, el especialista en genética de la Universidad de Lovaina Ronny Decorte reconoció que los resultados obtenidos en los familiares de Hitler son «sorprendentes». «Los resultados son increíbles, si se tiene en cuenta la concepción del mundo de los nazis, en los que la raza y la sangre tenían un papel fundamental», destacó el especialista. Y agregó: «La preocupación de Hitler por sus orígenes estaba justificada. Los análisis demuestran que él tampoco era un ario puro».

No es la primera vez que los historiadores sugieren que Hitler tenía ascendencia judía. Se cree que su padre, Alois, era hijo ilegítimo de una relación entre María Schickelgruber y Frankenberger, un muchacho judío de 19 años.

Fuente: Perfil.com