Iyar

Iyar: Tiempo para la Introspección que permite la Autosuperación

Por P.A. David Nesher

 

Hemos aprendido que el segundo mes escritural, llamado con su nombre sumerio de Iyar, esta íntimamente relacionado con el atributo de la meditación e introspección de pensamiento.

Esta es una época de estrechez en la claridad y la percepción del amor divino, y la función del hombre en este mes es la búsqueda y el reconocimiento de la verdad, que, basada en el pensamiento viene como consecuencia de la fe que se ha establecido en el corazón de cada uno durante el mes de Nisan, por medio de su Pesaj.

El trabajo durante este mes, de búsqueda de la verdad y perfeccionamiento del pensamiento, se manifiesta claramente en el trabajo del Conteo del Omer que permite purificarnos de nuestras toxicidades

La introspección en la búsqueda de la Verdad, junto con el temor de Yahvéh, son dos cualidades esenciales en el inicio del individuo por el sendero espiritual.

El mes de Iyar es conocido desde la antigüedad como el mes característico de la curación tal como lo manifiesta el acrónimo de la letras que componen la palabra Iyar: Alef-Yod-Yod-Resh con la siguiente frase simbólica: «Ani Yahvéh Rofeja: «Yo soy Yahvéh Tu curador» (Éxodo 15:6). Esta relación también se expresa en el mismo valor numérico de las palabras Iyar y Aruj (remedio).

Se reconoce que las enfermedades del hombre vienen primordialmente como consecuencia de una inadecuada alimentación o una mala disciplina y asimilación de la digestión. En relación con esto, la trama bíblica nos indica que el Maná, el alimento celestial de los hebreos en el desierto, comenzó a caer durante este mes, al igual que la provisión de la fuente de agua.

Iyar representa claramente el trabajo básico del mes que es la conquista y el fortalecimiento interno del individuo.

El sol se convertirá en un anillo de fuego en la luna nueva de Iyar.

«El sol se tornará en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Yahvéh»
(Joel 2:31)
La próxima luna nueva será un día con marca profética. Y es que el cosmos nos volverá regalar un bello espectáculo este marte 29 de abril con la aparición en los cielos de un «anillo de fuego» gracias a un eclipse anular de Sol.
Este tipo de fenómeno conocido como eclipse «anular» tendrá lugar porque la Luna estará cerca de su mayor distancia de la Tierra, con lo cual se hará demasiado pequeña para cubrir el Sol completamente. Como resultado, se producirá un efecto de una especie de aro de fuego alrededor de la silueta de la Luna.
Sin embargo, el fenómeno no se verá desde todo el mundo. De hecho, el único lugar desde el cual será visible en todo su esplendor será una pequeña zona deshabitada en la Antártida llamada Tierra de Wilkes. En algunas otras partes del mundo, por ejemplo en Indonesia y toda Australia, se podrán observar las fases parciales del eclipse, siendo los mejores lugares para ello Tasmania y la parte norte de la isla australiana.
Debido a que el Sol no estará en ningún momento totalmente cubierto por la Luna, el eclipse puede ser dañino para los ojos, con lo que se recomienda utilizar un cristal con filtro adecuado, escribe el medio.
Más allá de toda explicación astronómica, es muy importante darnos cuentas que para nosotros los escogidos los fenómenos de los que estamos siendo testigos son evidencias de las señales celestiales que tanto nuestro Mesías, como sus santos apóstoles nos pautaron como marcas escatológicas de Su Parusía.
Las señales son claras, el sol se oscurecerá y la luna no dará su resplandor, dijo Isaías; el sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre dijo Joel; El sol se oscurecerá y la luna no dará su resplandor Dijo Yahshúa mismo; y el sol, se puso negro y la luna toda como sangre es lo que vio Juan, y que escribió en el Apocalipsis. Es la misma imagen en todos los relatos, fácil identificar: eclipses con incidencia en el plano profético.

El Eterno Dios tiene a los tiempos actuales de la Tierra en sujeción a Sus pautas proféticas. Todo lo anunciado en Su Palabra está viniendo al cumplimiento perfecto de Su buena voluntad para con los hombres.

 

Mientras la Gran Ramera entronará en los lugares celestiales a una nueva potestad de tinieblas, canonizando a un hombre pecador y apóstata, el Trono de Yahvéh marcará los cielos con esta señal que apunta a señalar que la Alianza mesiánica que Él ha hecho con los hombres no podrá ser pisoteada por los herederos de los protocolos de Nimrod. El Señor movilizará desde esta luna nueva de Iyar a todos sus ejércitos a fin de traer eventos naturales sobre Europa y Asia que causarán el terror de sus habitantes. Todo lo que ofende al Eterno no podrá continuar en su dinámica.

 

¡El Señor viene pronto!

 

1er Día de la Novena de Pentecostés: El Amor al Propósito Eterno

Por:  P.A. David Nesher 
El evangelio de Reinado de Yahvé comienza con el anuncio de la buena noticia de que Jesucristo murió, resucitó y
fue sentado a la diestra de Dios en los lugares celestiales. 
La buena nueva del Eterno anuncia  que Jesucristo murió
por nosotros. La frase «por nosotros» no significa que Cristo murió por culpa
nuestra, sino más bien que Jesucristo murió en
nuestro lugar.
En efecto, él fue nuestro substituto en la cruz del
Calvario. La cruz es el símbolo de la maldición del pecado. Ella representa al árbol de la ciencia del bien y el mal, de cuyo fruto (consejo de cosmovisión) el primer Adán decidió comer y así caer de su condición y posición de hijo del Altísimo en co-regencia universal. Por ello, la cruz, representa  a la muerte espiritual misma en la que la humanidad se encuentra viviendo desde aquel remoto entonces.
Es en ese sentido que Jesús tomó en la cruz nuestro lugar. Él se ofreció como el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. De este modo todo decreto de maldición se rompió y por su muerte quedamos libres de toda condenación. Por eso, Pablo se atreve a decir que «si
uno murió por todos, luego todos murieron»
(2ª Cor. 5:14). 
Pero el Señor Jesucristo no solo murió por nosotros, sino que también resucitó por nosotros. Entonces,
podemos decir, usando una lógica celestial que fluye desde lo dicho por Pablo, que si uno resucitó por todos, luego todos
resucitaron
. Esto, no obstante, no es algo que solo podamos inferir de las
palabras de Pablo, sino que está afirmado explícitamente por él cuando expresa: «En
el cual (en el bautismo)
fuisteis también resucitados con él (con Cristo)»
(Col. 2:12). «Y
juntamente con él nos resucitó»
(Ef. 2:6ª)
. La buena noticia del Evangelio del Reino, es que no solo Jesucristo resucitó; también en él, hemos resucitado
nosotros. Él fue nuestro sustituto no solo en la muerte, sino también en la
resurrección.
Ahora bien, hay algo que surge todavía cuando leemos la carta de Pablo a los Efesios. Allí descubrimos algo más fuerte y maravilloso que nos ayuda a completar nuestro entendimiento acerca del alcance completo de la obra salvador de Cristo. Desde sus líneas se nos revela que nuestro bendito Señor, siendo aún Jesús de Nazaret, también fue ascendido y exaltado por
nosotros. Entonces aquí también podemos decir, siguiendo la sentencia del
apóstol Pablo, que si uno fue ascendido
y exaltado por todos, luego todos fueron ascendidos y exaltados
. Y en
efecto, Pablo, en su carta a los Efesios, mostrando la gloria de la iglesia,
declara que Dios «asimismo nos hizo
sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús»
(2:6b). Nuestro
amado Señor también fue nuestro sustituto en la ascensión y en la exaltación. No solo Cristo
murió, también morimos nosotros; no solo Cristo resucitó, también resucitamos
nosotros; no solo Cristo fue ascendido y exaltado, también lo fuimos nosotros. En esto
consiste la buena noticia del evangelio del Reino. En esto consiste el  secreto de la gloria de la Iglesia.
Lo invito a abrir su espíritu y escuchar esta enseñanza apostólica:

Iyar: Un mes para celebrar la Salud y la Prosperidad

El mes de la Luna de Iyar tiene de parte del Eterno energías celestiales muy propicias para la Prosperidad de sus escogidos.

Solamente se requiere colocar atención a la Intención Bendita de su Propósito Eterno en nosotros. De acuerdo a esto la actitud mental que se desarrollará en cada hijo del Altísimo será acorde a las sustancia de fe que ellos activen en el aprendizaje de su proceso celestial.
Lean muy atentamente las pautas proféticas que en el documento siguiente mi espíritu les comparte en el Poder de nuestro Eterno Abba.

David Nesher: MES DE IYAR _ Un camino para peregrinar contando y valorando cada paso resplandeciente.

¡Dios dará fama a su Nombre mediante tus adversidades!

CALLEJÓN SIN SALIDA: LUGAR DE FAMA DIVINA

 1 Corintios 10: 1-12

 

Ver Éxodo 14:1-14; 21- 23; 27-31

El Eterno lleva siempre a sus escogidos al cumplimiento de la Plenitud de su Propósito Eterno, en medio de todo tipo de circusntancias.

Alrededor del 1500 a.C. , Dios decide volver a la humanidad a su diseño original, determinando en su et (tiempo de cuplimiento del propósito) obrar a través de Moisés en medio de Egipto liberando a su pueblo santo Israel. Lo cierto es que Israel era una nación de esclavos. Millones de seres humanos que clamaban al Dios de Abraham, Isaac y Jacob, pero que para sus amos egipcios, y especialmente para Faraón, no era nadie trascendental.

El Eterno había sido sacado de la dimensión histórica humana en el episodio de la rebelión de Edén. Desde aquel tiempo solamente había sido invocado por algunos en sus familias y clanes, más no era reconocido como Dios Verdadero que soberanamente gobierna.

Ahora era el momento justo en el que Él llevaría a Israel a una situación en la que Faraón, figura del Dragón, los apretaría y haría creer que no había salida alguna.

Desde esta historia el Eterno se aseguró una enseñanza para nosotros a fin de que nuestra marcha no sea alterada por falsas percepciones que la mentalidad de Mitzraim ha implantado en nuestra mente.

El profeta y apóstol David Nesher expone desde los códigos escriturales los secretos celestiales para provocarnos MOTIVACIÓN a fin de encontrar la salida que Dios mismo ha colocado ya delante de nosotros.

(disfruten de la enseñanza en este video)

Mes de IYar: Mi tiempo de Resplandecer

En medio de los tiempos humanos el Eterno ha decidido llevar a sus escogidos a vivir el espíritu y la energía que guarda su AÑO de FIESTAS.
En la Luna Nueva de Iyar el Creador pretende que su Pueblo aprenda a contar cada día como parte de un proceso espiritual en el que su Espíritu Libertador los capacita en su interioridad para encontrar esa fortaleza interior que permite vencer toda intimidación.
En el mes de Nisán, el Señor estableció el inicio del conteo de tiempos de sabiduría tal como el salmista lo aprendió en su oficio profético (Salmo 90:12). En el segundo mes el Omer está en plena dinámica. Omer es la tarea de ir contando día a día, desde la Fiesta de las Primicias, los 50 días para llegar a la Fiesta del Shavuot (Pentecostés). En ese momento el Pueblo ya está vibrando en la expectación del Fuego que graba la Ley del Eterno en sus corazones.
En el primero mes se dio el Milagro de los Milagros: la Revelación de la Luz Infinita encarnada en un hombre (Mesías). En el mes de Iyar cada integrante del Israel del Mesías trabaja en reflexión a fin de hacer que esa Luz Infinita que se encuentra en su espíritu pueda romper todo obstáculo almático y resplandezca en medio de los pueblos.
Durante este mes lunar se asume que nuestra identidad de hijo nos capacita para manifestarnos tal cual el diseño original de Dios.
Disfruten de la enseñanza profética que el profeta y apóstol David Nesher implantó en el corazón de los santos convocados en esa noche para ejercer su potestad de jueces en Cristo y decretar 29 días de fortaleza y sanidad.