Autoridades australianas ordenaron este domingo el desalojo de tres mil ochocientas personas residentes en la ciudad de Saint George del estado de Queensland (noreste), debido a las inundaciones que afectan la región desde hace una semana y que hasta el momento han causado la muerte de una persona.
La jefa de gobierno de ese estado, Anna Bligh, precisó que la medida fue tomada para evitar que los habitantes quedaran aislados ante la imposibilidad de levantar a tiempo diques que contengan las aguas, debido a que estiman que el nivel del agua del río Balonne, que atraviesa la ciudad, podría alcanzar 14 metros por encima de lo normal.
“El nivel del agua está subiendo más rápido de lo calculado (…) Esta es una situación muy seria y pido a la población que coopere”, añadió Bligh.
Entre tanto la alcaldesa de Saint George, Donna Stewart, aseguró ante la prensa que “no sabemos hasta cuándo tendremos la carretera abierta debido a la enorme cantidad de agua que baja por los ríos Maranoa y Balonne. Por eso, hemos pedido que la gente evacúe cuanto antes”.
Equipos de rescate recuperaron el cuerpo de una mujer que desapareció el viernes al ser arrastrada por el agua después de que su automóvil quedara atrapado en medio de una riada.
Las autoridades destacaron que un avión Hércules C130 de las Fuerzas Armadas fue enviado a Saint George, para trasladar a 41 pacientes ingresados en un centro de salud hacia un hospital de Brisbane, la capital de Queensland. El hogar de ancianos también fue evacuado.
También se habilitaron autobuses para ayudar a los vecinos sin medio de transporte a salir hacia la localidad vecina de Dalby, donde se ha instalado un centro para evacuados.
Ocho helicópteros de defensa participan a las operaciones de búsqueda, rescate y aprovisionamiento en la zona inundada, llevando a los vecinos a lugares seguros y lanzando alimentos, cobijas, suministros médicos y artefactos fundamentales como generadores.
En Charleville, también ciudad de Queensland, cerca de 600 personas fueron trasladadas a un refugio temporal mientras las autoridades reparan desperfectos en los diques que contienen las aguas desbordadas del río Warrego.
Las inundaciones iniciaron hace una semana en Australia, luego que las autoridades evacuaran a miles de personas en Nueva Gales del Sur, ante el reporte de fuertes tormentas.
Saint George quedó devastada en 2010 por una riada después de que el río Balonne subiera hasta los 13,4 metros, y también padeció los efectos de las inundaciones que en el año 2011 causaron más de treinta muertos en Queensland.