Según un medio radial local, los agentes utilizaron gases lacrimógenos y tiros al aire para alejar a los manifestantes, quienes respondieron con piedras y montaron barricadas en Cabo Haitiano, la segunda ciudad más importante del país.
Ante estos hechos, las actividades escolares en esta localidad fueron suspendidas al igual que la de los comercios e instituciones públicas.
Esta es la segunda ola de protestas populares para exigir que sean sacadas del país caribeño las fuerzas de paz de la ONU de Nepal que arribaron a Haití el pasado 9 de octubre, pocos días antes de la aparición del cólera en el territorio.
En este país de Asia Meridional el cólera es una enfermedad endémica, sin embargo, la ONU emitió un comunicado recientemente afirmando que se le realizaron pruebas a los 710 soldados nepaleses antes de entrar a la nación caribeña para comprobar que no padecían la enfermedad.
Los haitianos sostienen que los militares asiáticos descargaron sus heces en el río Artibonite, muy utilizado por la población y en cuyas aguas se comprobó la presencia de la bacteria responsable de la enfermedad.
El campamento de soldados nepaleses enviados por la Minustah está muy cerca del río Artibonite, razón por la que las autoridades de salud haitianas suponen que es el foco de la enfermedad.
En octubre pasado, el presidente haitiano, René Preval, afirmó que la epidemia de cólera de su país era importada.
La Minustah desmintió la versión del presidente haitiano, no obstante, recientemente expertos en genética informaron que el ADN de la cepa de cólera que afecta a Haití coincide con las que se encuentran comúnmente en el sur de Asia.
Haití es considerado el país más pobre de América Latina con una tasa de aproximadamente 70 por ciento y ocupa la posición 150 de 177 en el Índice de Desarrollo Humano de las Naciones Unidas.
La situación humanitaria en la nación caribeña se agravó tras el terremoto del pasado 12 de enero, que mató a unas 250 mil personas y dejó a millón y medio en las calles. Diez meses después, los sobrevivientes del terremoto aún viven en campamentos improvisados, en carpas de plástico o artesanales.
En estos campamentos, donde hombres, mujeres y niños viven hacinados, no se tienen medidas mínimas de higiene.
El cólera en Haití apareció el pasado 20 de octubre con el descubrimiento del primer caso.
Este domingo se contabilizaron 917 muertes y 14 mil 642 hospitalizaciones por causa del mal.
Pese a los esfuerzos realizados para ayudar a Haití a combatir la enfermedad, ésta continúa creciendo a ritmo acelerado y con posibilidades de infectar a por lo menos 200 mil personas debido a las condiciones de vida insalubres de la población.