sexo, un trastorno del comportamiento que afectó a conocidos actores,
músicos y deportistas, según los últimos datos de la Sociedad para la
Promoción de la Salud Sexual de ese país.
“Hasta hace algún tiempo, el caso típico era el de hombres de entre 40 y
50 años, mientras que ahora están aumentando vertiginosamente también
los casos entre las mujeres, los ancianos y los adolescentes”, explicó
Tami VerHelst, vicepresidente del Instituto Internacional de Trauma y
Adicciones.
Según la revista estadounidense Newsweek, esta tendencia en la sociedad
de EE. UU. se convirtió en “una epidemia nacional”, que -llevada por
compulsiones similares a las provocadas por el alcohol o las drogas-
conduce a quienes la sufren a practicar el sexo de formas cada vez más
extremas.
A la enfermedad se la conoce médicamente como hipersexualidad y se
caracteriza por una necesidad incontrolable de tener relaciones,
masturbarse o ver pornografía. Entre los famosos que sufren de este mal
están: Michael Douglas, Bill Clinton, Britney Spears y Tiger Woods,
entre otros.
Las personas con esa adicción usan el sexo como calmante para la
ansiedad, para sentirse menos solos o para derrotar el miedo a ser
indeseados o inadecuados. Las razones de esta tendencia radicarían en
las “bondades” que brindan los aparatos tecnológicos y en la liberación
de la pornografía en los medios, sobre todo en Internet.
UU., 40 millones de personas entran a diario en páginas web
pornográficas.
“Esto no significa que todos aquellos que miran imágenes pornográficas
se vuelvan dependientes, pero la constante exposición a impulsos
sexuales es muy peligrosa, sobre todo para las personas más
susceptibles”, indicó el médico David Sack, director general del
Promises Treatment Centres de Los Ángeles.
No obstante, según reporta Newsweek, citando a un instituto médico de
esa misma ciudad, las personas que deciden iniciar un tratamiento para
salir de la dependencia deben ser monitoreadas constantemente para
evitar que puedan caer en el túnel de la droga o la depresión, luego de
salir de su adicción.