El momento de despertar puede influir en la forma en la que afrontamos el resto del día. Iniciar el día de buenas, no es un objetivo, sino una actitud que debemos adoptar.
Como conclusión de esta imagen, podemos asegurar que ese momento específico y decisivo que significa despertar se convierte en el primero de los esfuerzos grandes que todos debemos sí o sí hacer.
Todos sabemos que comenzar con energía las actividades de un nuevo día es vital para que durante éste se puedan realizar las tareas planeadas, para saber responder a los imprevistos y para lograr los objetivos que cada quien visualiza.
Con todos los problemas que cualquier persona puede tener en la época actual, es posible pensar que no es fácil despertar de buen humor, sin embargo esto sí es posible, ya que todo es cuestión de mantener una actitud positiva.
Despertarse cada día tratando de encontrar soluciones más que problemas, ayuda a llenarse de energía y buena actitud para resolver las actividades cotidianas. En el video doméstico que a continuación veremos podremos notar los detalles pequeños que celebra la niña protagonista del mismo.
Es necesario ser positivo al despertar a un nuevo día pues si hay cosas que no se lograron en un día, pueden alcanzarse en otro y esto también es bueno y forma parte del Propósito Eterno de Dios.
ES difícil pero no imposible, solo proponerselo cada uno y disciplinarse en el "arte del buen despertar".
Bendecidos/as!