«Así ha dicho el Señor de los ejércitos: Los ayunos del cuarto mes, y de los meses quinto, séptimo y décimo, serán para la casa de Judá motivo de gozo y alegría, y de gran celebración. Así que amen la verdad y la paz».
En dos días más estaremos en el día 17 del cuarto mes del calendario hebreo que el Eterno le revelara a Israel que debía guardar.
En este día, la casa de Judá ha establecido desde la destrucción del primer Templo, un ayuno que inicia un tiempo de consternación en la que obligan a sus almas a conpungirse en la evaluación de toda deficiencia espiritual que conlleve juicios del Eterno sobre Jerusalén y la tierra santa. El objetivo será conquistar las mismas y evitar así toda actividad destructora del sistema enemigo.
Ayer, estuve impartiendo a los santos del Monte los lineamientos necesarios para que entremos juntos y unánimes en un proceso de Spa Celestial, en el que el Eterno Abba nos hermoseará por medio de Su Victoria redentiva (Salmo 149:4).
A continuación los invito a disponer sus mentes y corazones y escuchar lo que el Espíritu Santo de Dios tiene para Sus santos en estos días dónde la abundancia del pecado, obliga a que la Gracia de Abba se manifieste en sobreabundancia sobre las naciones.
Parte 1
Parte 2
Parte3
El Bosquejo de este Ayuno de 21 Días sería el siguiente:
PROPÓSITO:
OBJETIVO:
PROCESO:
RESULTADO:
En cuanto a cómo llevar la DIETA PROFÉTICA de estos días recomiendo leer:
Consejos para realizar el Ayuno de Daniel (haz click sobre el título)